Es indispensable que la Universidad se piense y reconsidere como el espacio idóneo donde conviven todas las corrientes del pensamiento, donde se debaten en lo teórico y se materialicen en lo práctico, beneficiado en la sociedad.
La Responsabilidad Social Universitaria se representa como una forma de aprendizaje social, dado que este concepto implica que las Instituciones de Educación Superior asuman la responsabilidad de formar profesionales sensibles a las necesidades y/o problemáticas sociales.
De esta manera para las universidades la responsabilidad social se centra en su propósito académico de formación humana y profesional, así como en la generación del conocimiento, por lo cual retoman este concepto a partir la especificidad de su labor universitaria.
En la Educación Superior la tutoría se ha abordado desde un enfoque centrado en favorecer el desempeño en ambientes escolares.
Por consiguiente la función que realiza el tutor es mediar en las relaciones al interior de la institución educativa, así como también en las relaciones de esta con las familias de los alumnos y el entorno social.
La tutoría debe constituir una de las estrategias académicas fundamentales, correspondientes a la visión de la educación superior.